Nadie escarmienta en cabeza ajena

Hoy hago mío este refrán para no tener que usar la palabra Madresfera en el título de mi post. Sí, voy a contar mi marcha de la plataforma, de eso que se hace llamar comunidad de blogs porque lo de secta quedaba feo. Para ello comenzaré desde los inicios y como poco a poco me fui desencantando con todo esto hasta su fatal desenlace. Ya os adelanto que me quedan pocas ganas de seguir participando en "comunidades" de blogueros después de ver todo lo que he visto en tan poco tiempo en este mundillo 2.0.

Al llegar a este mundo de los blogs fui conociendo a gente poco a poco, a algunos más y a otros menos, y entre ellos había algunos que ya me iban advirtiendo de lo que iba a encontrarme en Madresfera. Esto explica tanto la imagen como el título del post y es que nadie escarmienta en cabeza ajena y hasta que no lo vives y lo ves no te das cuenta de la realidad. Pero empecemos desde el principio...

Llegué a la plataforma por recomendación tras empezar con mi blog y me di de alta en la llamada comunidad. Al principio todo iba muy bien, cada post mío lo veía promocionado en #LaRevista y, aunque no daba muchas visitas, uno se contentaba al ver que le daban visibilidad. Mencionar a Madresfera en un tweet era un RT seguro y también llegaba algo más de gente a tu blog, así que iba explotando todo eso en mis inicios.

Todo iba bien hasta que llegó la tan sonada metedura de pata de Sunne con el tema del acoso y tal que no quiero remover mucho porque ya está todo más que hablado al respecto. Yo fui muy claro y creo que nada ofensivo con el tema ya que simplemente dije que no iba a hacer escarnio con el muchacho por ese fallo, que con reconocer el error y pedir perdón me parecía más que suficiente. Eso sí, remarqué que me parecía que flaco favor le hacían sus amigos queriendo ocultar ese fallo y hacer ver que no había dicho nada malo. ¿Veis alguna maldad en pronunciarme con respecto al tema y dar mi opinión de manera educada y asertiva? Pues ellos sí, porque desde ese momento vi como fueron decayendo mis interacciones con Madresfera. Difícil era verme en #LaRevista y aún más un RT de su Twitter. Papá Gades había osado a no ser un palmero más y había demostrado tener una opinión contraria a la sectaria plataforma.

Al principio no creía que fuera así, había mencionado alguna vez a Madresfera y no había tenido ni un simple Me Gusta, y lo achacaba a que recibirían muchos tweet y no todos serían vistos. La cosa me iba escamando más cuando veía que personas que les habían mencionado segundos después no les faltaba su RT y Me Gusta. Aún más obvio era cuando había gente que me contestaba al tweet y ellos si eran retuiteados o les daban Me Gusta, pero del tweet original que era el mío pasaban como de la mierda. Desde ese momento decidí dejar de mencionarles y usar el hashtag de #Madresfera en mis promociones.

Llegaron los Premios Madresfera y no hice ni una pizca de promoción para que nadie me propusiera como candidato, pero aún así lo hicieron y me llegó el correo de que optaba a los premios en la categoría de Paternidad. Era una alegría que la gente se acordara de ti y quizás se hubieran merecido que durante todas las votaciones hubiera hecho algo más de campaña, cosa que hice poco la verdad. Todo fue normal hasta que las votaciones se ordenaron y vi como mi mujer, Lidita Swan, se encontraba en un 3º lugar y yo en un 5º. Por encima mía había competidores muy fuertes y aunque pedí el voto en alguna ocasión tenía claro que no iba a ascender más. Sin embargo aposté fuerte por la candidatura de mi mujer y a ella si le hice algo más de promoción. Veía que Madresfera estaba como loca dando RT's y me pasó por la cabeza el mencionarles también en mis tweets. ¿Resultado? Ignorado por completo una vez más, mientras veía que a una misma persona le hacía 2 RT en menos de 20 minutos de diferencia entre tweets. También me asaltó una duda en un hilo de otra bloguera y le pregunté a la plataforma, ¿A vosotros os contestaron? A mi tampoco...

Pronto llegaron a mis oídos que lo que terminó pasando podía pasar y es que no es la primera vez que bajan a gente del ranking, terminan subiendo otras y, casualidades de la vida, éstas acaban ganando el premio. No serán tan tontos, pensaba yo para mis adentros, pero me equivocaba. Un mail hablando de votos fraudulentos hacía presagiar que volvería a pasar y que las cosas tomarían el color que más le convenía a otros.

Cuando hubo el reajuste me encontraba en pleno viaje de trabajo a Madrid y no me lo podía terminar de creer, al final había pasado, como tantas veces me habían advertido. Ahora sí lo estaba viviendo, ahora sí fui consciente de que los nuevos no somos tan bienvenidos en la plataforma como nos quieren hacer creer. Bueno, miento, hay una manera de entrar en el círculo selecto de la plataforma pero para ello hace falta una lengua y muy poco amor propio.

Por todo esto, he decidido dejar de formar parte de Madresfera, realmente no me aportaba nada, antes tampoco me lo quitaba pero tras esto último no tenía más remedio que quitarme de este tóxico lugar. Por decirlo me han caído varios Unfollows en Twitter pero realmente son personas que me importan más bien poco, con los que jamás he cruzado una palabra y que si un día me dieron Follow fue para que se lo devolviera y engordar sus cifras en una Red Social. Ahora comienza una nueva etapa, una etapa limpia y fuera de círculos que no me convienen en absoluto y espero seguir teniendo a toda mi audiencia acompañándome en ella.